Mundial de 1990 – ITALIA
Camerún sorprende a Argentina en el partido inaugural
La Copa del Mundo de 1990 fue la segunda ocasión para Italia de organizar un Mundial, ya que el primero lo realizó en 1934 y allí se coronó como campeón.
Este torneo es muy recordado por la canción que inauguró el evento con la participación de los cantantes Gianna Nannini y Edoardo Bennato, quienes entonaron las emocionantes estrofas de “Un’estate italiana”, que hasta el día de hoy emociona a los aficionados.
En esos años, la Serie A de Italia era la más prestigiosa de todas las ligas europeas por la presencia de las máximas estrellas del fútbol mundial como Maradona, Matthäus, Gullit, Baggio, Ruben Sosa, Klinsmann, Van Basten y Rijkaard, entre otros.
El 8 de junio, en el Estadio Giuseppe Meazza, se disputó el partido inaugural entre la vigente campeona Argentina, liderada por Diego Maradona, ante Camerún. El encuentro marcó la primera gran sorpresa del Mundial, ya que los “leones indomables” se impusieron por 1 a 0 con gol de François Omam-Biyik y con la presencia de un veterano de 38 años que daría mucho que hablar: Roger Milla.
Argentina clasificó como mejor tercero en el grupo que compartió con Rumania, Camerún y Unión Soviética (donde otra vez Maradona utilizó su mano, sobre la línea para evitar un gol, algo que no fue advertido por el árbitro) y a partir de octavos comenzó su mejor rendimiento, cuando enfrentó a otro de los candidatos: Brasil. Una y otra vez, los embates de la “verde amarela” se encontraron con la manos de Goycochea y cuando se jugaba el minuto 36 del segundo tiempo, luego de una gran jugada de Maradona, Caniggia venció a Taffarel para marcar el 1 a 0 que selló el partido a favor de Argentina.
El anfitrión, Italia, contaba con su gran estrella Roberto Baggio pero en el debut estaban empatando con Austria y allí fue cuando se recurrió a los servicios de un delantero de la Juventus que comenzó a resolver todos los problemas con sus goles: Salvatore “Toto” Schillaci. Los dueños de casa clasificaron invictos y primeros en su grupo, y en octavos de final los esperaba otro tercero con mucho prestigio como Uruguay. Con goles de Schillaci y Serena, Italia ganó 2 a 0 y avanzó a cuartos de final.
Alemania, dirigida por Franz Beckenbauer, era una de las selecciones favoritas y cumplió en su grupo al golear a Yugoslavia y Emiratos Árabes, y empatar contra Colombia, en el partido del recordado gol de Freddy Rincón al final del encuentro. Fueron primeros del grupo y en octavos se enfrentaron a Países Bajos, con quien tenían una gran rivalidad. Los goles de Klinsmann y Brehme sentenciaron el 2 a 1 y el pasaje a cuartos de Alemania, donde lo esperaba Checoslovaquia.
En la primera semifinal, disputada en la ciudad de Nápoles, donde brillaba semana tras semana Maradona con su equipo, Argentina e Italia protagonizaron el partido más esperado del campeonato. Luego de 120 minutos de fútbol que terminaron 1 a 1, ambas selecciones fueron a la definición por penales, donde la figura del portero Goycochea fue determinante al contener los remates de Donadoni y Serena para llevar a Argentina a la final.
En la otra semifinal, Alemania e Inglaterra disputaban su cuarto duelo en Mundiales. El encuentro fue de mucho estudio y pocas acciones de peligro en ambas porterías. Las anotaciones de Brehme y Lineker llevarían el partido a la prórroga, y luego de los tiros penales, Alemania avanzó a la final.
El partido por el título se jugó en el Estadio Olímpico de Roma y se repetía la final de 1986. Los aficionados italianos se volcaron en contra de Argentina y el encuentro se hizo rudo durante muchos pasajes. Sobre el final del partido, Klinsmann cayó en el área y el árbitro Codesal señaló el polémico penal que Brehme convirtió en gol, para que Alemania obtuviera el tercer Campeonato del Mundo de su historia.
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El Once Ideal del Mundial de Rusia 2018