Por el Prof. Jorge Ottati

Mucha gente se molesta por lo que ganan los grandes deportistas, pero, sin embargo, hay razones muy importantes que justifican dichos sueldos.

En las últimas décadas, el deporte se ha convertido en un gran negocio por los contratos de televisión, y si los grandes dueños de los equipos pagan es porque esa inversión les produce grandes ganancias.

Los aficionados admiran a los deportistas; las cámaras de televisión siguen todos sus movimientos y las grandes marcas publicitarias los buscan para promocionar sus productos. Son permanentemente tapas de periódicos deportivos y las redes sociales los ponen en contacto con todos aquellos que siguen a sus estrellas. Y además, la venta de camisetas con su nombre es un gran ingreso para los clubes profesionales.

Una muestra de ello es David Beckham, quien a lo largo de su carrera como profesional vendió más de 10 milllones de camisetas, lo que ha supuesto ingresos superiores a los 1250 millones de dólares.

En la búsqueda del éxito que otorgan los títulos, los grandes equipos del mundo se plantean retos que muchas veces están muy por encima de sus posibilidades financieras. Esto inclusive ha preocupado a las autoridades gubernamentales, que han dicho que los clubes se cuiden de no gastar más allá de sus posibilidades reales. Sin embargo, los grandes clubes han hecho oídos sordos y siguen ofreciendo enormes contratos a sus superestrellas. Real Madrid gasta, en un año, 250 millones de dólares brutos en su plantel y su técnico Carlo Ancelotti.

Cristiano Ronaldo ha renovado hasta el 2018 con Real Madrid y con ello se convertirá en el futbolista mejor remunerado del plantel merengue al ganar 21 millones de dólares netos por cada una de las próximas temporadas. Además, la estrella portuguesa mantendrá el 50% de los derechos de su imagen.

En la vereda de enfrente, se encuentra Lionel Messi, quién el año pasado extendió su vínculo con Barcelona, en lo que fue su sexta firma con el club catalán, también hasta el 2018 . Sin embargo, la llegada de Neymar y el suculento salario que percibirá el brasileño, unido a la estelar presencia de Luis Suárez, llevó a una nueva reunión con la dirigencia que le mejoró los 16 millones  de dólares que ganaba, para pasar a ser el mejor pago del fútbol español con 25 millones anuales.

Lionel Messi

En los Estados Unidos no se quedan atrás y varios jugadores de béisbol, de la NFL y de la NBA tienen sueldos siderales.

Álex Rodríguez, beisbolista de los Yankees, gana 32 millones de dólares por año y dicha cifra no incluye contratos publicitarios ni derechos de imagen.

En diciembre del 2012, Albert Pujols firmó contrato con Los Ángeles Angels  por diez años por un total de 254 millones de dólares, que lo ubicaba en el segundo lugar por detrás de Álex Rodríguez.

Pero este año, los Marlins de Miami sacudieron el tablero al ofrecerle al beisbolista Giancarlo Stanton un contrato de 13 años con un valor de 325 millones de dólares, el más grande en la historia del deporte. Si hacemos las cuentas, Stanton percibe un promedio de… ¡¡¡69 mil dólares por día!!!

La superestrella de Los Ángeles Lakers, Kobe Bryant, con 19 años de experiencia en la NBA, firmó también una extensión de su actual contrato que le permitirá recibir 48 millones de dólares garantizados por dos temporadas.

Kobe Bryant

Sin embargo, en la actualidad, el boxeador Floyd Mayweather, campeón mundial invicto del Peso Welter, es el deportista que más dinero cobra por año: 105 millones de dólares.

Los deportistas profesionales están expuestos a la crítica del público, pero sus grandes ingresos muchas veces proceden directamente de los dueños de equipos, quienes son multimillonarios que quieren invertir para seguir acrecentando su patrimonio y ser reconocidos por todos. La mayoría de los aficionados conoce las cantidades millonarias que perciben los deportistas, pero el triunfo del equipo y la satisfacción de sentirse campeón hace que al simpatizante no le preocupe la astronómica diferencia de salarios que existe entre ellos y sus ídolos deportivos.

Si a mí me preguntan si es justo, afirmo que sí, ya que debido a esa calidad de deportistas, los clubes, que hoy más que nunca son empresas, obtienen éxitos y mucho más dinero para sus arcas; además, porque el deporte se ha convertido en un negocio y todo el que tiene un negocio lo hace para ganar dinero… no para perder.

Manolo