Mundial 2010: España brillante Campeón del Mundo
Finalmente España, luego de 60 años de constantes frustraciones, logró su máximo objetivo al coronarse Campeón del Mundo. El encuentro fue una verdadera batalla, donde Holanda, para que no le sucediera lo mismo que Alemania en la semifinal, se olvidó del fútbol para salir a golpear al adversario ante la complicidad del inglés Howard Webb, quien realizó uno de los peores arbitrajes del torneo.
España trató por momentos de respetar su idea futbolística y así salió con Xavi e Iniesta en la mitad de la cancha y la subida permanente por las bandas de Ramos y en menor proporción la de Capdevila por la izquierda. Holanda mientras tanto, renunciaba al fútbol para trabar con faltas en la mitad de la cancha el circuito de fútbol español y la naranja bien podía haber quedado con un hombre de menos cuando De Jong golpeó en el pecho a Xavi Alonso ante la pasividad de Webb que solo sacó tarjeta amarilla.
En el complemento se produjo la mejor jugada de Holanda cuando Robben, a velocidad, a los 62 minutos, se filtró en la defensa y en el mano a mano con Casillas le permitió a este último hacer la atajada más valiosa del torneo. A los 75 España tuvo su oportunidad cuando Sergio Ramos en un tiro de esquina cabeceó solo por encima del horizontal. España seguía confiando en su juego y continuaba buscando espacios en la última zona holandesa y a los 83 otra vez aparece Robben obstaculizado por Puyol para perderse una nueva oportunidad. Así llegamos a los tiempos extras.
España tenía más llegada y no quería llegar a los penales, mientras que Holanda sin Heitinga -expulsado- apostaba al final. Y otra vez antes del cierre, como sucediera también en la Champions, apareció Iniesta, el más claro, el mejor, quien aprovechó un pase de Cesc para rematar con la derecha el balón más importante en la historia del fútbol español.
España ha demostrado que jugar bien, o intentarlo, es el camino más corto para ganar ante una Holanda que presionada cedió a sus principios futbolísticos por la ansiedad de no perder una nueva final del Mundo. España sufrió por momentos, pero la inteligencia y la serenidad de Del Bosque le permitió hacer variantes como la de Navas que lo volvieron a la lucha. España digno campeón del primer mundial en suelo africano.
Partido por el tercer lugar: Como dice el himno uruguayo, “Sabremos cumplir”
Recuerdo cuando volvieron los jugadores del Mundial de México 70, dirigidos por ese gran jugador y técnico que fue Juan Eduardo Hohberg, luego de haber perdido ante Alemania, en un partido donde Uruguay dominó, en una tarde fría, no solamente por la temperatura ambiente, sino que también por la falta de calor humano hacia aquellos jugadores que nos habían dado la gran satisfacción de quedar cuartos en un Mundial de Fútbol. Pero lamentablemente era la época en que a Uruguay se le exigía mucho por sus grandes logros y la mentalidad de todos era: “solo sirve salir campeón”. En mi carrera periodística siempre pensé que se había sido injusto con aquellos grandes jugadores y el largo ostracismo futbolístico de tantos años de insucesos me lo demostró.
Quién hubiera pensado que 40 años más tarde, luego de una irregular eliminatoria donde costó muchísimo llegar a la repesca, llegaríamos al Mundial de Sudáfrica para ser protagonistas.
Cuando se sortearon los grupos en diciembre en Ciudad del Cabo y quedamos alineados en el Grupo A con Sudáfrica, México y Francia, el maestro Óscar Tabárez manifestó: “el grupo es difícil, pero para todos” para agregar más tarde, “Uruguay puede sorprender en el Mundial de Sudáfrica”.
Quedamos primeros en la serie con 7 puntos, le ganamos a Corea del Sur con dos golazos de Suárez, hicimos historia con el partido ante Ghana, definido magistralmente con el penal del “Loco” Abreu, pusimos contra las cuerdas en la semifinal a Holanda y por el tercer puesto tuvimos a maltraer a Alemania, pero al final algunos errores defensivos nos complicaron el resultado.
Por si fuera poco, Diego Forlán fue proclamado como el mejor jugador del Mundial. ¡Qué más podemos pedir! Nos sentimos orgullosos de este puñado de orientales dirigidos por el “maestro” que le pusieron fútbol, coraje y emoción al Mundial de Sudáfrica, para que ahora se respete más que nunca la gloriosa celeste. ¡Arriba Uruguay!