Por Fernando Ottati
Los avances de esta película, que vemos en televisión y en nuestros teléfonos inteligentes, nos muestran a Henry Cavill (Superman) y a Dua Lipa, la famosa cantante ganadora del Grammy, en una elaborada escena de baile y en otras situaciones que le hacen creer a los espectadores que esos dos actores son los personajes principales, cuando en realidad no lo son. Inclusive, el póster de la película tiene en el centro a Cavill y a Lipa a su lado. En definitiva, Dua Lipa aparece en los primeros minutos de la película (solo tres escenas) y Cavill aparece a cuentagotas. Ahí comienza el primer problema de este largometraje: los responsables del mismo quieren engañar a los espectadores. En realidad, los personajes principales de esta historia son Bryce Dallas Howard (Jurassic World) y Sam Rockwell (Iron Man 2) y quienes completan el elenco Samuel L. Jackson (Avengers), Bryan Cranston (Breaking Bad), John Cena (Fast & Furious) y Sofía Boutella (Kingsman). El director de la película es Matthew Vaughn (Kingsman, Kick-Ass) quien nos presenta este thriller de espías con varias escenas de acción y mucha violencia, que llamativamente no supera la calificación de PG-13.
La película cuenta la historia de Elly Conway (Dallas Howard), una recluida escritora que tiene un gato como mascota, quien escribe una saga de libros muy exitosos sobre espías; muchas cosas que escribió en el libro terminan ocurriendo en la realidad. Durante un viaje en tren, un agente secreto llamado Aidan (Rockwell) le salva la vida porque la División, una organización liderada por Ritter (Cranston) la quiere matar. Cuando Elly ve a Aidan, ella se imagina que él es el personaje de sus libros, Argylle (Cavill), ya que Henry Cavill no es real, es el personaje principal de sus historias de espías, un personaje ficticio al igual que Dua Lipa y John Cena. Pero a su vez, en otras escenas ella se ve en un espejo y también ve a Cavill, lo que confunde totalmente a los espectadores. Por ello mencionamos que Cavill aparece en muy pocas escenas, porque él no es en quien se centra la película; la película se enfoca en la escritora, y no en el personaje que ella escribió.
El gato de Elly es en realidad el gato de la esposa del director, la modelo Claudia Schiffer, y a este animalito se lo ve muchas veces dentro de una mochila muy particular que utiliza Elly, y la mascota genera ciertas situaciones graciosas, ya que el personaje de Aiden tiene alergia a los gatos, pero no mucho más que eso. Realmente no se entiende por qué los productores y las agencias de márketing hicieron tanta promoción con un gato que realmente no tiene nada que ver con la historia (se lo ve en todos los pósters promocionales de la película, inclusive hay uno en el que aparece solamente la mochila y el gato dentro de ella).
Lamentablemente, cuando vemos esta película inmediatamente comenzamos a recordar escenas que ya vimos en otras producciones de Hollywood, y eso nunca es bueno, ya que, lamentablemente, Argylle no tiene mucho de original. Al parecer, los actores John Cena, Sofía Boutella y Samuel L. Jackson rodaron sus escenas en solamente algunas horas, ya que Cena aparece en dos escenas y Jackson también en un par, en las cuales conversa con Dallas Howard y en otras espera recibir un mensaje mientras ve en la televisión un partido de la NBA. El colmo es lo que ocurre con la actriz francesa Sofía Boutella, quien aparece… ¡en una sola escena!
La película es muy confusa, demasiado larga (2 horas y 19 minutos), con escenas tediosas, y con explicaciones redundantes de todo lo que estamos viendo claramente en la pantalla. La confusión se genera ya que hay varias “vueltas de tuerca” que nos hacen pensar una cosa, cuando en realidad es otra, pero nunca queda claro quiénes son los buenos y quiénes los malos. Hay muchas escenas que no tienen sentido; en una de ellas, cerca del final de la película ,hay petróleo en el piso y por esa razón los personajes no usan sus armas de fuego y no disparan, pero al final de esa larga escena, uno de los personajes termina “patinando” y disparando a varias personas que no usan sus armas, olvidándose completamente de la explosión que puede ocasionar el petróleo. Hay otra larga escena donde los buenos disparan y matan a todos los malos, mientras hacen una coreografía de baile dentro de humos de varios colores que llenan la pantalla y crean formas de corazones. Ellos disparan sin ver, mientras bailan, y los malos caen al suelo alcanzados por sus balas. Nada tiene sentido en esta película, pero esa escena curiosamente genera algunas risas entre los espectadores. Argylle es tan confusa que realmente no satisface ni a la audiencia, ni tampoco a los críticos especializados que en Rotten Tomatoes le dieron una calificación de solo un 32%.
Dallas Howard inexplicablemente, al final de la película cambia de peinado, luce rubia, y usa la misma ropa de la primera escena de Dua Lipa, pero su cuerpo no luce igual que el de la cantante. Dallas Howard, la hija del famoso director Ron Howard, aclaró a la prensa que desde hace tiempo comenzó a negarse a hacer dietas y tener que reducir su peso para hacer sus roles, y dijo que si la querían contratar tendrían que aceptarla como es. Realmente llama la atención que a una actriz que está pasada de peso la forzaran a usar un vestido tan ajustado que no le queda nada bien, ya que no está tan delgada como en sus anteriores papeles de la trilogía de Jurassic World. Por alguna razón surgió el rumor, que llegó a los oídos de los propios actores, de que el libro en el que se basa esta película fue escrito por la cantante Taylor Swift. La cantante no aclaró el tema, pero muchos de sus seguidores promocionaron ese asunto en las redes sociales y eso generó, de alguna manera, cierta expectativa por la película.
El eslogan de este filme es: “Cuanto mejor es el espía, mayor es la mentira”; realmente, la mentira fue de los productores, que cuando se dieron cuenta de lo mala que era esta película en las proyecciones anticipadas, decidieron engañar a los espectadores creando avances y promociones con actores de renombre que aparecen solamente en algunas escenas haciendo lo que en la industria es denominado como cameos.