El Museo de Peñarol se encuentra ubicado en Montevideo, la capital de Uruguay, dentro del Palacio Peñarol, Cr. Gastón Güelfi, y fue inaugurado de manera oficial en el año 2001, en el marco de los festejos por los 110 años de la institución aurinegra.
En el museo, que está abierto al público los días sábados y domingos, se pueden observar los innumerables trofeos obtenidos por el Club Atlético Peñarol a lo largo de su rica historia, donde se destacan las 5 Copas Libertadores de América (1960 contra Olimpia, 1961 ante Palmeiras, 1966 versus River Plate, 1982 frente a Cobreloa y 1987 con América de Cali) y las 3 Copas Intercontinentales (1961 ante Benfica, 1966 contra Real Madrid y 1982 frente a Aston Villa).
Se destaca en gran forma el trofeo que acredita a Peñarol como el Mejor Equipo del Siglo XX en Sudamérica, entregado en el año 2009 por la Federación Internacional de Historia y Estadística del Fútbol (IFFHS), donde se tuvieron en cuenta todos los torneos internacionales sudamericanos disputados por cada uno de los equipos, en donde Peñarol sumó 531 puntos y encabezó la lista histórica, al superar a Independiente de Avellaneda, que finalizó con 426,50 unidades. A partir de ese momento, el término Campeón del Siglo comenzó a utilizarse para nombrar a Peñarol, al igual que ocurre en Europa con Real Madrid, quien finalizó en la cima de los clubes del viejo continente.
Existe una sección especial dedicada al delantero ecuatoriano Alberto Spencer, máximo goleador de la Copa Libertadores con 54 tantos y uno de los símbolos del equipo aurinegro que se proyectó internacionalmente en la década del 60, y que al igual que el famoso Santos de Pelé, recorrió el mundo entero para disputar partidos, mientras acumulaba títulos y escribía páginas de gloria deportiva. Spencer conquistó 8 Campeonatos Uruguayos, 3 Libertadores y 2 Intercontinentales, entre otros trofeos.
En otro de los sectores destacados se homenajea a Fernando Morena, el máximo goleador del fútbol uruguayo con 668 tantos. Su nombre es sinónimo de gol para el aficionado carbonero, quien no olvida los 27 que anotó en partidos clásicos ante Nacional, el tradicional rival. Autor de 7 goles en un partido en 1978, segundo máximo artillero en la Libertadores con 37 tantos, líder goleador histórico del Campeonato Uruguayo con 230 dianas, son solamente algunas de las marcas de Morena, un delantero especialista en batir récords, ganador de 7 Campeonatos Uruguayos y la Libertadores e Intercontinental de 1982.
Los Quinquenios, 5 títulos de Campeonato Uruguayo en forma consecutiva, también tienen su lugar de privilegio, ya que Peñarol es el único equipo en haber conseguido este logro en dos oportunidades: desde 1958 a 1962, liderados por Néstor Gonçalves, y desde 1993 a 1997, de la mano de Pablo Bengoechea.
Las camisetas de Obdulio Varela, Juan Alberto Schiaffino y Alcides Edgardo Ghiggia, integrantes de la recordada “Máquina del 49” y héroes del Maracanazo con la Selección Uruguaya en 1950 tienen su lugar destacado, así como los guantes y botines del legendario guardameta Ladislao Mazurkiewicz, quien es considerado uno de los mejores de la historia del fútbol.
Uniformes, banderines, medallas, pósters, diplomas, revistas y elementos conmemorativos adornan el museo, al igual que cientos de cuadros con las fotos de planteles y jugadores mirasoles que hicieron historia, tanto por sus títulos locales e internacionales como por sus proezas y hazañas deportivas. Una imagen que llama mucho la atención es la foto de ocho futbolistas que el día 23 de abril de 1987 ganaron por 2 a 1 ante Nacional, en un partido que pasó a la historia como “el clásico de los 8 contra 11”. Peñarol estaba empatando 1-1 y al minuto 75 sufría su tercera expulsión, y contra todos los pronósticos no solamente evitó la derrota, sino que anotó el gol del triunfo a través de Jorge Cabrera a 7 minutos del final.
Carboneros, aurinegros, mirasoles y manyas son solamente algunas de las palabras que identifican en cualquier parte del mundo a los aficionados del equipo uruguayo con camiseta oro y carbón, y que cada 28 de setiembre repiten una frase que los emociona: “Serás eterno como el tiempo y florecerás en cada primavera”.