En los meses previos a la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010, el Profesor Jorge Ottati entrevistó a Alcides Edgardo Ghiggia, el protagonista del gol que valió un título en la histórica victoria de la Selección Uruguaya por 2 a 1 contra Brasil, momento en el cual nació la expresión “Maracanazo”.

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Alcides Edgardo Ghiggia fue el hombre que dejó en silencio a 200 mil fanáticos en el Estadio de Maracaná, con el gol que le dio el segundo Campeonato Mundial de la FIFA a Uruguay el 16 de julio de 1950 y que desde hace mucho tiempo se ha convertido en leyenda.

Ghiggia fue uno de los integrantes de la “Máquina del 49” de Peñarol, donde debutó con 22 años, que ganó todos los torneos de esa temporada, con una delantera de lujo que hizo historia por su velocidad, habilidad, técnica y potencia, integrada por Ghiggia, Hohberg, Míguez, Schiaffino y Vidal.

Luego del éxito del Mundial, en 1953 emigró al fútbol europeo donde jugó 9 años en la Roma y 1 en el Milan, para volver a Uruguay con 37 años, donde continuó en actividad hasta los 42. “Yo jugaba al fútbol porque me gustaba; ahora es un tanto diferente; lo que pasa es que el fútbol ha cambiado mucho y se ha vuelto más comercial”, nos expresa con un dejo nostálgico.  “Solo me gusta ver los partidos de la selección, pero no voy al Estadio; los veo por televisión y si el partido es malo cambio de canal. El fútbol es un espectáculo y eso lo debe entender el jugador, si no la gente se aburre y no va más”.

 – ¿Qué le pareció el grupo que le tocó a Uruguay para el Mundial de Sudáfrica 2010?
– “Se luchó mucho y se consiguió lo deseado por todos: llegar a Sudáfrica, ya que a mi entender Uruguay no debe faltar en un Mundial. Estuve mirando el sorteo de grupos y de los tres rivales que nos tocaron en la serie el más complicado por su fuerza me parece que es México; del local Sudáfrica no tengo muchos antecedentes pero es un fútbol fuerte y veloz. Y la selección de Francia no está pasando por su mejor momento. Es nuestra obligación clasificar en el grupo”.

– ¿Qué le ha parecido el desempeño de Uruguay durante las Eliminatorias rumbo al Mundial?
– “Yo he visto todos los partidos de los celestes, pero no me han gustado y siempre digo que para hacer una buena Eliminatoria se deben ganar todos los partidos de locales y después sacar algún punto afuera. A Uruguay no lo vi bien y con los jugadores que disponía el técnico si hubieran tenido buen nivel podían haber logrado la tercera posición. Se perdió mal con Brasil de local, y además se perdió con Argentina un partido que era accesible y que nos daba la cuarta posición directa. Lo que sucede es que jugamos muy a la defensiva, con muchos envíos largos para ver qué pueden hacer Suárez y Cavani, que son rápidos y goleadores, pero que les debe llegar bien la pelota; yo siempre dije que se deben tener tres delanteros netos arriba para cubrir un mayor frente de ataque y presionar a la defensa adversaria”.

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– ¿Quiénes serán los favoritos para ganar el Mundial 2010? 
– “Los favoritos son Italia, Alemania, Brasil, y quizás Holanda. España podría ser si consolida todo lo bueno hecho actualmente, ya que en anteriores mundiales siempre lo intentó y nunca llegó. También puede haber algún equipo africano que dé la gran sorpresa. Va a ser un Mundial muy difícil por lo competitivo. Argentina no me gusta cómo está jugando, porque el técnico no está apto para dirigir una selección y su inclusión ha sido un tema político, pero no podemos negar que tiene jugadores importantes”.

– ¿Qué es lo que ha cambiado de la época en que usted jugaba al fútbol?
– “Lo que sucede es que el fútbol sudamericano, rico en técnica, ha intentado copiar del europeo la velocidad y la fortaleza física; antes se jugaba distinto, con tres atacantes netos arriba; ahora se juega muchas veces con uno y se ataca muy poco. Además, se jugaba con otro amor y entrega por la camiseta que uno defendía”.

– ¿Qué recuerdos afloran en su memoria de aquel 16 de julio de 1950?
– “Que le he dado una enorme alegría a mi país y a la gente que vivió esa época junto con mis compañeros. Muchas veces pienso que si Uruguay hiciera bien las cosas le podría dar a esta juventud la oportunidad de poder vivir y gozar con la obtención de un nuevo campeonato del mundo. Con aquel Brasil nos conocíamos, porque nos habíamos enfrentado en la Copa Río Branco en tres ocasiones.
En aquellos años no había jugadores del exterior; se jugaba con mucha inteligencia y entrega y con los jugadores que había se podían hacer dos selecciones. Cuando convertí el segundo gol quedaban 11 minutos, pero no hubo reacción ni en los rivales ni en el público; el silencio del Maracaná fue impresionante”.

Alcides Edgardo Ghiggia. Genio y figura; el hombre que con su gol le dio un título a Uruguay y que hizo célebre una frase: “El Papa Juan Pablo II, Frank Sinatra y yo somos los únicos que conseguimos que el Estadio Maracaná se quedara en silencio.”

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