En el Estadio Sun Life de Miami, ante 45 mil espectadores, en su gran mayoría hondureños, se realizó el último amistoso de Inglaterra frente a Honduras antes de emprender ambos su viaje al Mundial de Brasil 2014.
El encuentro, que finalizó 0 a 0, fue sumamente disputado, con muchos roces y para nada pareció amistoso, ya que hubo un expulsado y ocho tarjetas amarillas. Las dos selecciones querían evitar la derrota a toda costa, en especial Honduras, que venía de haber caído en sus dos partidos anteriores en Estados Unidos, ante Turquía e Israel.
Inglaterra, que días antes había empatado 2 a 2 ante Ecuador en el mismo escenario, utilizó nuevamente a varios jóvenes junto a futbolistas experimentados, como Steven Gerrard, Wayne Rooney y Frank Lampard.
Pese al resultado, el encuentro tuvo varias incidencias de riesgo para ambos equipos y Noel Valladares debió lucirse de continuo para salvar su valla.
El partido fue interrumpido durante media hora, a los 23 minutos del primer tiempo, por una amenaza de tormenta eléctrica.
En Honduras, Carlo Costly se complementó muy bien con Jerry Bengtson en ofensiva, mientras que Víctor Bernárdez en la defensa fue el más sólido.
Inglaterra, que hizo 5 cambios en el segundo tiempo, no aprovechó la desventaja que tuvo Honduras a partir del minuto 65, cuando fue expulsado el defensa derecho Brayan Beckeles por juego brusco, y no tuvo buena puntería cuando fallaron sus remates Sturridge y Wilshere.
Al finalizar el encuentro, en conferencia de prensa, el técnico de Honduras, el colombiano Luis Fernando Suárez, se mostró conforme con el rendimiento de sus dirigidos, mientras que Roy Hodgson mencionó que le fueron muy útiles estos encuentros que realizó en el calor y la humedad de Miami, para aclimatarse a lo que será la ciudad de Manaos donde debutará frente a Italia.